La gran polémica que se desató a partir de la protesta del comedor que elaboró chorizos de polenta llegó a su fin, de la peor manera. Tras 25 años de servicio y ayuda a los más carenciados, “El Sol” cerró sus puertas por falta de insumos para cocinar.

Walter Vallejos, referente del espacio que fundó los “Chorilentas” para evidenciar la falta de apoyo estatal para sostener la cocina comunitaria, explicó los motivos del cierre al móvil de Cadena 3 Rosario, en Siempre Juntos.

“No tuvimos respuesta de Nación, solamente de provincia, que alcanzó para 150 personas. Lo repartimos en dos comedores. Ya cerramos otros merenderos por falta de leche”, enumeró Vallejos.

“Lamentablemente tenemos que ir cerrando. Nación no nos dijo ni cuando nos puede mandar las cosas. Decidimos cerrar porque no lo podemos sostener. Los comerciantes que nos ayudaban ya no pueden hacerlo”, lamentó el referente del comedor, que expresó: “Esto nos genera bronca y tristeza. Comenzamos en el 98”.