Sin mucho que mostrar, tras una decadente gestión, que día a día demuestra que Omar Perotti no estaba preparado ni tenía equipo suficiente para gestionar la provincia de Santa Fe, decidió que la mejor estrategia para intentar recuperar su imagen es "disfrazarse" de defensores de la producción.

El diputado nacional Roberto Mirabella, mano derecha del gobernador, quien pretende ser su sucesor pero con limitadas chances, también ha apostado a revertir su mala imagen con un discurso "productivista" y de apoyo a las PyMEs.

El historial no los ayuda. Perotti se posicionó en contra del campo con su apoyo a la recordada 125, hizo poco por frenar el cepo a las exportaciones de carne impuesto por su propio gobierno nacional o de disminuir las retenciones al agro. Roberto Mirabella hace pocos meses votó en contra de la producción de biocombustibles, en contra de los intereses santafesinos y beneficiando a las provincias petroleras.

Seguramente seguirán usando toda la maquinaria provincial y destinaran los recursos necesarios para intentar convencer a los santafesinos que ellos son lo que en realidad no fueron.