Narco-violencia en Rafaela: prisión preventiva para dos jóvenes acusados ​​de amenazas y ataques armados

Rafaela vuelve a quedar en el centro de la preocupación por la violencia narco tras la detención de dos jóvenes acusados ​​de llevar a cabo ataques armados y amenazas para apropiarse de viviendas y continuar con la venta de drogas. Los imputados, de poco más de 18 años, conocidos como "Ratón Tomi" y "Tomajugo", fueron señalados como "soldaditos" al servicio de un conocido capo narco que maneja operaciones desde la prisión.

El juez Javier Bottero dictó prisión preventiva sin plazos para ambos, luego de que el fiscal Juan Manuel Puig detallara los crímenes que se les atribuyen. Uno de los casos más graves ocurrió en la madrugada del 2 de febrero, cuando "Ratón Tomi" irrumpió en una casa del barrio Progreso armado con una lanza casera y un arma de fuego. Tras exigir a los ocupantes que abandonaran la vivienda para usarla como un "kiosco de drogas", disparó cuatro veces contra uno de ellos, hiriéndolo en la pierna.

Inicialmente, la víctima intentó protegerse del peligro que implica hablar en un entorno dominado por el miedo y la ley del silencio, asegurando que los atacantes eran desconocidos enmascarados que escaparon en moto. Sin embargo, las amenazas posteriores lo llevaron a revelar la verdad: su agresor era el propio "Ratón Tomi", quien vive frente a su casa y ya se había instalado en la vivienda.

Otro episodio ocurrió en la medianoche del lunes al martes, cuando los acusados ​​ingresaron violentamente a la casa de una mujer en calle Alvear, mientras esta se encontraba con sus hijos pequeños. Allí, además de robar, dejaron una advertencia clara al dañar su pila Pelopincho con cuchillas, una señal vinculada a los códigos del barrio para imponer el silencio.

El trasfondo de estos ataques es el mismo: la disputa por el control de espacios estratégicos para la venta de drogas. En este caso, la casa de la víctima había sido utilizada previamente como un punto de distribución de estupefacientes, lo que la convertía en un lugar codiciado por los grupos narcos. Según las investigaciones, los agresores actuaron en nombre de Yiyo Ramallo, un capo narco conocido por operar desde su celda y por su extensa red de "soldaditos" que ejecutan sus órdenes.

Ambos imputados tienen antecedentes delictivos. "Tomajugo" fue declarado culpable de un homicidio por encargo en Morteros y está vinculado a varios intentos de asesinato en Rafaela, aunque muchos de esos casos se encuentran trabados por la falta de colaboración de testigos. "En estos barrios, nadie bate la cana", explicó el fiscal Puig durante la audiencia, haciendo alusión al miedo que reina en la zona y que obstaculiza las investigaciones.

El juez Bottero, tras escuchar las pruebas y testimonios, determinó que los acusados ​​representaban un peligro para la comunidad, por lo que ordenó su detención sin plazos, en espera del avance de las investigaciones. Mientras tanto, la ciudad sigue buscando respuestas para frenar el avance de la violencia ligada al narcotráfico, un problema que ha puesto en jaque su otra calma provincial.