Este domingo una rafaelina descubrió que su vivienda había sido objeto de un robo mientras estuvo ausente por el fin de semana largo. Según se retiró de su domicilio para viajar, y al regresar encontró su casa violentada.

Al llegar, la damnificada observó que la puerta de ingreso de madera que da a la calle estaba rota a la altura de la cerradura, con un bloque central faltante. La puerta conduce a una galería que lleva a otra puerta de madera, la cual también había sido forzada de la misma manera. Aunque los delincuentes no lograron abrir completamente esta segunda puerta, hicieron un agujero suficientemente grande para pasar a través de él.

Una vez dentro de la vivienda, constató la falta de una notebook, un televisor Smart y aproximadamente $20,000. Los ladrones utilizaron los agujeros en las puertas para extraer los objetos robados, dejando ambas puertas cerradas con llave, lo que indica que entraron y salieron por los huecos que habían creado.