El municipio de Rafaela se encuentra en pleno proceso para avanzar con el remate y la compactación de motos retenidas. Aunque aún no hay una fecha confirmada para el remate, el procedimiento ya está en marcha y se estima que aproximadamente 150 motovehículos serán subastados una vez que el proceso administrativo, actualmente en la Dirección Nacional del Registro de la Propiedad del Automotor (DNRPA) en Buenos Aires, finalice.

Motos a remate:

Del total de motos a rematar, un 90% son vehículos de 110cc de calle, mientras que el resto corresponden a modelos tipo CG o 150cc. Entre las marcas que irán a subasta se encuentran:

•    Honda: 45 unidades
•    Guerrero: 34 unidades
•    Corven: 33 unidades
•    Brava: 8 unidades
•    Yamaha: 7 unidades
•    Motomel: 6 unidades
•    Otras marcas como Appia, Beta, Gilera, Keller, Mondial, Suzuki y Zanella completan la lista.

Las motos fueron seleccionadas en base a criterios como su estado estructural, frenos, luces, escapes y la antigüedad del secuestro. Respecto al precio base de las motos, este será definido por el martillero o la fiscalía municipal una vez que el proceso esté próximo a finalizar.

Compactación en marcha:

Por otro lado, el municipio ya tiene avanzado el proceso de compactación de aproximadamente 600 motos y 30 automóviles, a través del programa nacional PRO.DE.CO. del Ministerio de Seguridad de la Nación. Este sistema ha sido utilizado previamente por la Municipalidad y es considerado el más eficiente a nivel nacional para este tipo de acciones.

Uso de motos retenidas por el municipio:

Además, se confirmó que 16 motos retenidas serán destinadas para el uso de áreas municipales, como la inspección de calles. Estas unidades, en su mayoría de 110cc, serán apropiadas a nombre de la Municipalidad de Rafaela mediante un complejo proceso administrativo.

Inversión del dinero recaudado:

El dinero obtenido del remate será destinado a la mejora de infraestructura, mobiliario y la reparación de vehículos del Departamento de Protección Vial y Comunitaria. Aún no se han dado detalles sobre las condiciones exactas del remate, pero generalmente se exige un pago mínimo del 30% en el momento de la compra, y el resto debe abonarse antes de retirar el vehículo.

Con ambos procesos avanzando, se espera que el municipio pueda liberar espacio en los depósitos de vehículos y, al mismo tiempo, generar fondos para mejorar el servicio de seguridad vial en la ciudad.