Un vecino de Rafaela fue víctima de una estafa, cuando recibió un mensaje de WhatsApp que supuestamente provenía de su hermano. En el mensaje, le solicitaban la transferencia de $75.000 para realizar un pago. Confiando en la legitimidad de la solicitud, el hombre accedió a realizar la transferencia sin prestar atención a los detalles del comprobante.

Posteriormente, el estafador, haciéndose pasar por su hermano, le pidió otros $100.000 alegando que había cometido un error en el monto total, que en realidad era de $175.000. Nuevamente, la víctima accedió a realizar la transferencia. Fue entonces cuando se percató de que algo no estaba bien y que no se trataba de su hermano, ya que recibió un aviso de su esposa informándole que su cuñado había sido hackeado.