Carlo Ancelotti: de la lechería familiar a la élite del fútbol, el valor del tiempo y la paciencia

Carlo Ancelotti, actual entrenador del Real Madrid, encontró en su infancia en Reggiolo, un pequeño pueblo en el norte de Italia, enseñanzas que lo acompañan hasta hoy en su carrera en la élite del fútbol.

Deportes12/11/2024RedacciónRedacción
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 Criado en una familia humilde dedicada a la producción de leche y queso parmesano, Ancelotti aprendió el valor de la paciencia y el trabajo constante.

Desde niño, ayudaba en la lechería familiar, donde su familia criaba vacas y producía queso parmesano, un proceso que requería esperar un año antes de venderse y generar ingresos. "Mi padre vigilaba atentamente la economía durante todo ese tiempo hasta que finalmente entraba el dinero", recuerda Ancelotti en uno de sus libros. Este proceso de espera y disciplina forjó en él la serenidad y perseverancia que hoy aplica en el fútbol, tanto en su relación con los jugadores como en la construcción de un equipo sólido y armonioso.

Para Ancelotti, Reggiolo es más que un lugar de infancia; es un lugar de raíces y valores. “Es tierra de queso... y la familia estaba muy unida", comenta, enfatizando cómo esa calma y unidad familiar influyeron en su carácter. Estas enseñanzas sobre el valor del tiempo y el esfuerzo están hoy presentes en su estilo como técnico, aportando a su Real Madrid una armonía y estabilidad que recuerdan la paciencia necesaria para hacer queso parmesano, según señala el periodista Sergio Cortina.

Este trasfondo humilde y de trabajo artesanal le permite a Ancelotti comprender el fútbol como un proceso de maduración, de paciencia y cuidado, similar a las lecciones que recibió en la lechería familiar y que lo han moldeado como uno de los entrenadores más respetados del mundo.

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