Los números que más duelen: el 66,1% de los niños en Argentina viven en la pobreza y el 27% son indigentes
Los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) en su último informe de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) revelan un panorama desolador para los niños en Argentina: el 66,1% de los menores de 14 años viven en hogares cuyos ingresos no alcanzan para cubrir la Canasta Básica Total (CBT). Esto significa que no tienen lo necesario para satisfacer sus necesidades básicas.
Lo más alarmante es que el 27% de estos niños son indigentes, lo que implica que uno de cada cuatro sufre hambre, ya que en sus hogares no cuentan con ingresos suficientes para acceder a la Canasta Básica Alimentaria (CBA), es decir, a los alimentos mínimos para subsistir.
En comparación con el primer semestre de 2023, la situación se ha deteriorado drásticamente. En ese periodo, el 56,2% de los niños eran pobres, y la indigencia infantil afectaba al 13,6%. En solo un año, la pobreza infantil aumentó 9,9 puntos porcentuales, mientras que la indigencia se duplicó, subiendo 13,4 puntos porcentuales.
Estos datos reflejan el impacto devastador de la crisis económica en la población más vulnerable del país. Las medidas económicas, la inflación y el ajuste fiscal implementado en los últimos meses han profundizado la situación de las familias con menores ingresos, generando un retroceso en términos de bienestar social.