El precio de la yerba mate aumentó un 35,3% en dos meses desde la desregulación de precios que alcanzó al sector en abril, cuando un paquete de un kilo se vendía a $3.400 en promedio. A finales de junio, la cifra llegó a $4.700. Este aumento acumulado del precio de la yerba mate en el segundo trimestre del año fue más alto que la inflación de alimentos, que alcanzó el 14,4% en el mismo período, según un informe elaborado por la Universidad Argentina de la Empresa (UADE).

Desde 2002 y hasta marzo de este año, el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) era el encargado de fijar los valores de referencia. Durante la primera etapa de producción, el organismo negociaba y establecía los precios mínimos que garantizaban a los productores cubrir sus gastos y obtener un margen de ganancia. Sin embargo, a raíz de la desregulación en abril, las industrias que se encuentran en las "fases intermedias" de la cadena de producción deben pagar un valor más alto para comprar la materia prima, lo que implicó "un aumento de precios en los paquetes de yerba que están a la venta en los supermercados".

El informe de la UADE señala que "el aumento de precio del kilo de hoja verde se trasladó de la cadena de producción hasta el precio final", afectando principalmente a los consumidores. En la primera semana de julio, un paquete de yerba se encontraba a $3.950 en promedio. En cuanto a la decisión del Gobierno de abrir las importaciones para los productos de la canasta básica, una medida tomada en marzo, uno de los efectos fue la llegada de yerba mate proveniente de Uruguay y Paraguay. Sin embargo, los paquetes de yerba importada tienen precios superiores o similares a los nacionales, por lo que no hubo un impacto significativo en el mercado.

En junio, el medio kilo de yerba mate argentina costaba $2.300, un valor similar a las provenientes de Paraguay ($2.900). En tanto, los paquetes de yerba uruguaya se encontraban en las góndolas a $4.500, un 95,65% más cara que las de producción nacional. El incremento en los precios de la yerba mate se ha convertido en un tema de preocupación para los consumidores, quienes ven cómo este producto básico continúa encareciéndose en un contexto económico ya de por sí complicado.