Proyecciones del primer “presupuesto” del agro para 2025: toneladas, exportaciones y dólares
Escenario con condiciones climáticas favorables
La producción podría alcanzar un máximo de 143,2 millones de toneladas, un incremento del 9,3% interanual y superando el récord de 141,5 millones de toneladas registrado en la campaña 2018/19.
Soja: se espera que cubra 17,7 millones de hectáreas, un 8% más que en 2023, con una producción proyectada entre 52 y 53 millones de toneladas.
Maíz: aunque su área sembrada disminuiría un 21% debido a la plaga de chicharritas, la producción se mantendría en torno a las 52 millones de toneladas.
Trigo y cebada: el área sembrada de trigo crecería un 21%, con una producción de 20,4 millones de toneladas; la cebada registraría un aumento más leve, con una cosecha de 5,2 millones de toneladas.
Escenario con déficit hídrico
La producción total caería a 128,8 millones de toneladas, un 2% menos que en la campaña pasada.
Soja y maíz: sufrirían las mayores reducciones, con una caída del 6,6% en soja (49,6 millones de toneladas) y un descenso del 4,4% en maíz (47,6 millones de toneladas).
Exportaciones y generación de dólares
En un escenario favorable, las exportaciones de granos, aceites y subproductos alcanzarían 101,5 millones de toneladas, el tercer volumen más alto de la historia, generando ingresos por 35.500 millones de dólares. Esto representaría un incremento del 15% en volumen respecto a la campaña anterior, aunque sin superar los registros de 2018/19 y 2020/21.
En un contexto de déficit hídrico, las exportaciones generarían 32.600 millones de dólares, un 6% más que en la campaña pasada, pero un 1% por debajo del promedio de los últimos tres años.
Estos números reflejan la importancia de las condiciones climáticas en la determinación de los rendimientos agrícolas y, por lo tanto, en el impacto económico del sector agroexportador para 2025.