Las deudas familiares en Argentina alcanzan el nivel más alto desde 2018

El endeudamiento de las familias argentinas crece a un ritmo acelerado y ya alcanzó niveles que no se veían desde 2018. Según un estudio de la consultora EcoGo, basado en datos del Banco Central, los créditos para hogares llegan al 5% del PBI, con un 3,8% correspondiente al sistema bancario y un 1,2% al no bancario.

Aunque en comparación con países como Chile —donde el crédito representa el 99% del PBI— las cifras locales parecen moderadas, el aumento preocupa porque se da en un contexto de fuerte caída del ingreso real. Solo en el primer trimestre del año, los ingresos de los hogares bajaron un 1,3% respecto al último trimestre de 2024, según Empiria.

El acceso al crédito se potenció con el uso masivo de billeteras virtuales, que favorecieron la inclusión financiera pero también generaron un crecimiento del financiamiento informal. De hecho, el crédito no bancario ya es un 18,2% mayor al registrado en febrero de 2022 y está cerca de superar el pico de 2018.

Además, la morosidad también creció: actualmente, el 10,4% de los créditos presentan algún tipo de atraso en los pagos, un punto más que el mes anterior y tres más que en noviembre de 2024.

Mientras tanto, los créditos personales, prendarios e hipotecarios se duplicaron o más en el último año, impulsados por la necesidad de financiar consumos ante un contexto inflacionario y un mercado laboral debilitado.

El panorama expone una tensión creciente en los hogares argentinos: más crédito, menos ingresos y mayor presión financiera.